El miércoles 10 de setiembre se dictaron más de 80 clases públicas frente a la Casa Rosada para denunciar la crítica situación que atraviesa el sistema universitario público. Horas más tarde, el presidente vetó la Ley de Financiamiento Universitario, aprobada por amplia mayoría en el Congreso, que garantizaba la actualización automática del presupuesto por inflación y la convocatoria a paritarias para docentes y no docentes.
Sin ningún tipo de coherencia ni sustento real, Milei argumenta que la norma generaría más emisión, inflación y pérdida de poder adquisitivo. De este modo, vuelve a atacar a la educación superior y a la ciencia argentina. Es por eso que, como ya anticipamos, este viernes 12 habrá paro total en las universidades y nos encaminamos hacia una nueva Marcha Federal Universitaria a fin de mes.
Le exigimos al Congreso que insista con la implementación de la ley, para que se restituyan los recursos que garantizan el derecho a la educación de millones de estudiantes y se frene el desmantelamiento de la universidad pública.