Ayer re transmitimos el octavo encuentro “La Facultad de Psicología en tiempos de Pandemia. Desafíos y perspectivas. Otra Facultad es posible”. En esta ocasión contamos con la presencia de la profesora titular Marcela Bottinelli, Leonardo Gorbacz (autor de la Ley Nacional de Salud Mental) y Sofía Villalba (estudiante y militante de Motor Psico).
La presentación de la charla estuvo a cargo de nuestra compañera Cecilia Calloway, quien rápidamente le dio la palabra a Sofía, que como estudiante resaltó el valor de este espacio virtual para tejer redes aún en tiempos de confinamiento. Tras retomar algunos de los enunciados de los encuentros anteriores, Sofía se refirió a cómo la facultad no está funcionando de manera comunitaria y a la incertidumbre compartida tanto por estudiantes como por docentes respecto a la cursada virtual. Describió el funcionamiento del centro de estudiantes como una extensión de la mesa de entrada y mano derecha del decano de la facultad Biglieri, en deterioro del rol gremial que debería asumir. Tras estas afirmaciones, compartió los resultados de la encuesta que se realizó a principio del cuatrimestre e indicó que el 20 porciento de lxs alumnxs no tienen acceso a dispositivos tecnológicos, y 7 de cada 10 estudiantes calificaron como negativa su experiencia en el campus virtual.
Marcela Bottinelli invitó a pensar el entramado histórico en donde está inserta esta casa de estudio para motivar un debate permeable a la polifonía que habilite a otras formas de transitar la facultad. “La pandemia vino a mostrarnos la crudeza de las dificultades, inequidades y diferencias que hay en cada uno de los espacios de esta facultad, pero también originaron instancias creativas como este debate, que nos permite volver a escucharnos y crear un colectivo más diverso”, explicó. Luego instó a pensar el modo en que se construyen diferentes voces en la psicología, cuestión que permitiría delinear otro tipo de formación. En tanto la pandemia nos obliga a reinterpretar la manera en la que nos relacionamos, también es una oportunidad para cuestionarnos el tipo de profesionales que queremos ser y construir una universidad más justa, que abarque la pluralidad de voces. “Hay profesionales que desconocen la Ley de Salud Mental”, alertó. Para concluir, resaltó que si bien es notorio que la Facultad de Psicología carece de un sentido de comunidad, la pandemia demostró que las lógicas personales solo sirven a ciertos principios individuales.
Leonardo Gorbacz empezó su exposición manifestando que las instituciones terminan siendo muy conservadoras y satisfacen más a sus integrantes que a los miembros de la comunidad. La Facultad de Psicología no escapa a esta lógica por lo que debería hacer un esfuerzo para dejarse interpelar por la realidad que nos está atravesando y trabajar para sostener los lazos. Coincidiendo con Marcela Bottinelli, instó a preguntarnos si el tipo de profesional que se forma en esta universidad es el que la sociedad necesita. “Podríamos pensar en otra facultad que capacite a lxs psicologxs para que puedan integrarse a los equipos de salud que están atendiendo en la primera línea de respuesta. Profesionales que puedan realizar un trabajo territorial que implique acompañar a las personas que están en cuarentena y que no van a consultar a un especialista en salud mental”, agregó. Por otro lado, reiteró que la Ley de Salud Mental tiene que estar presente en la facultad porque “no solo cambia el modelo de atención en función del sistema de salud mental de nuestro país sino porque además implica que lxs psicologxs interactúen con otras disciplinas para decidir internaciones y trabajar con el sistema judicial para evaluar el sistema de apoyo que necesita una persona para vivir en la comunidad”.
Por último, advirtió que si bien la UBA está en Buenos Aires no debería limitarse a formar profesionales para una realidad focalizada a las problemáticas locales, que desconozca las circunstancias del resto del país.
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