Hernán Hougassian, Licenciado en Ciencias Ambientales y Director Provincial de Transición Ecológica del Ministerio de Ambiente de la Provincia de Buenos Aires, brindó una clase abierta en el marco del ITD sobre los distintos paradigmas que se debaten en torno a la cuestión ambiental y su relación con la desigualdad social.
De este modo explicó que uno de los aspectos que atraviesan la agenda pública y política en la actualidad es la falsa dicotomía entre la conciencia ambiental y los modelos de desarrollo. “En términos generales se hace referencia a esta tensión, cómo si fuera incompatible la dimensión del desarrollo con el cuidado de nuestro ambiente” sintetizó.
Asimismo, para abordar esta discusión es necesario definir qué entendemos por la palabra ambiente, que corrientemente está asociada a cierta “romantización de la naturaleza” que excluye a los seres humanos. Otra de las características que se presentan se relaciona con abordar lo ambiental como un recurso, lo cual se inscribe en lo que podemos denominar un ambientalismo liberal y que de cierto modo se contrapone al paradigma que aspira a visibilizar al ser humano como parte del ambiente.
Es importante empezar a pensar al ser humano como parte del ambiente para evidenciar cómo los efectos relacionados con sus problemáticas afectan de manera desigual a distintos sectores de la sociedad. En esta misma línea se inscriben los estudios relacionados con la economía ecológica, que parten de afirmar que el sistema económico es un subsistema dentro del sistema sociocultural, que a su vez está compuesto por seres humanos y que obviamente tiene flujo de ingresos y de egresos de materia prima y de energía.
Esta perspectiva habilita a considerar si el desarrollo económico puede ser entendido cómo tal pese a impactar positivamente en un sector, pero negativamente en otros sectores de la sociedad y en la integralidad del ambiente. Se trata entonces de un modelo de desarrollo que contiene cierta desigualdad y por ende se contrapone a un modelo de desarrollo con inclusión social. “Es a este entrecruzamiento al que hacemos referencia cuando se habla de que no hay justicia social sin justicia ambiental” indicó.
Es decir que la dimensión ambiental no puede dejar de ser una parte esencial de todo modelo de desarrollo, ya que “el objetivo tiene que ser mejorar la calidad de vida de las personas, para combatir justamente la desigualdad y la pobreza preservando los bienes comunes naturales. Hay una necesidad de transicionar hacia un modelo menos excluyente y más inclusivo”.
Por ello la transición ecológica hacia un modelo de desarrollo con inclusión social debe ser una responsabilidad de los Estados y un marco para el diseño de políticas públicas, al mismo tiempo que debe considerarse cómo una oportunidad para alcanzar la articulación entre lo público y lo privado y erradicar la creencia en ese supuesta incompatibilidad en torno al desarrollo económico y el cuidado del ambiente.
El Programa de Actualización en Innovación, Transferencia y Desarrollo (ITD) es un posgrado organizado por FEDUBA y la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA que, desde un abordaje interdisciplinario e intersectorial brinda herramientas para la gestión de políticas públicas de ciencia, tecnología e innovación en articulación con el conocimiento producido en nuestras universidades.