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Patricio Brodsky en “Normativa Laboral, Dictadura y Resistencia; desde 1976 a nuestros días”

Compartimos una de las primeras clases virtuales dictadas el cuatrimestre pasado de la materia “Normativa Laboral, Dictadura y Resistencia; desde 1976 a nuestros días”. En esta unidad, Patricio Brodsky repasa algunos temas vinculados a la explicación del funcionamiento del capitalismo en la teoría marxista y ciertas cuestiones relacionadas con el genocidio.

Desde la concepción marxista, todas las sociedades humanas poseen clases antagónicas confrontadas entre sí. En el capitalismo, la sociedad está basada en la producción de mercancías, que se conforman a partir del trabajo humano y cuentan con un valor y un valor de uso. El valor está dado por el tiempo de trabajo socialmente necesario para producir un bien, mientras que la fuerza de trabajo humana es lo que le otorga valor a la mercancía. Este concepto es clave, ya que la confrontación por los Derechos Laborales se relaciona a esta condición del trabajo humano. La pelea histórica por mejorar las condiciones laborales de la clase obrera se basa en disminuir las condiciones de explotación del trabajo humano.

Lo que conocemos como plusvalía es lo que se va a apropiar el capitalista. Por eso, toda lucha por aumentar el salario de lxs trabajadorxs es una lucha por la plusvalía relativa; mientras que la lucha por disminuir la jornada laboral se trata de la plusvalía absoluta. En estas circunstancias, y atendiendo a que la lucha de clases el motor de la historia, hay una puja que podemos explicar en tres momentos de lucha: ideológica, económica y política.

La acumulación del capital va a adoptar una forma particular en nuestro país con la llamada “Campaña del desierto” que llevó a un proceso de genocidio, definido como la destrucción de la identidad nacional de un grupo y su reemplazo por la identidad nacional del grupo perpretador. En Argentina se desarrolló una ocupación territorial y expulsión de los grupos nacionales, y en muchos casos también su apresamiento y transformación en esclavos. Fueron las grandes familias terratenientes quienes financiaron a esta mal llamada campaña y se beneficiaron con las grandes extensiones de tierra. En este período de la historia y utilizando al ejército argentino, el Estado Nacional funcionó como instrumento de regulación del modelo de acumulación capitalista. Asimismo, no fue el único momento donde podemos ver intervenciones del Estado Nacional a favor de los grandes capitales y en articulación con grupos parapoliciales.

Por ello, podemos afirmar que la represión del Estado Argentino no comienza el 24 de marzo de 1976 sino que el genocidio planificado contra nuestro pueblo empieza a operar mucho antes de esta fecha. Cuando se decide llevar a cabo el golpe de estado, se implementa una política genocida sobre aquellas personas que rechazaban un nuevo modelo de acumulación capitalista en Argentina. Afirmamos que se trató de un genocidio porque se persiguió de manera sistemática a todxs lxs opositorxs a los planes de las fracciones de clase dominante y se perpetró para preservar las condiciones de una hegemonía. La dictadura fue un plan de ingeniería social llevado adelante en función de un plan económico que beneficiaba a la clase dominante

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